Era el dios de la guerra y el silencio en la mitología nórdica. Era hijo de Odín y la giganta Grid. Vivía en el palacio de Landvidi, donde estaba rodeado de hierbas altas, flores silvestres y árboles jóvenes, lugar famoso por su silencio al igual que el de su morador.
Su mito más importante ocurre durante el Ragnarok, allí saltó de su caballo y luchó contra el lobo Fenrir que había devorado a Odín. Puso su pie sobre la mandíbula inferior del lobo y empujó con sus brazos la mandíbula superior partiéndolo en dos. Se dice que su zapato era especial, estando hecho de los restos de cuero que unos zapateros habían guardado durante años. Al final del Ragnarok es uno de los dioses que sobreviven y se convierte en uno de los gobernadores del nuevo mundo.
