Son los dioses creadores del mundo en la mitología aborigen australiana. Pertenecen a la mitología del pueblo Karadjeri del noroeste australiano.
Crecieron del suelo en la forma de dingos cuando no había nada. Ellos crearon los abrevaderos y los genitales para las primeras personas que carecían de ellos, los cuales hicieron a partir de hongos y setas, y además instituyeron la circuncisión. Los dos hermanos fueron asesinados cuando se metieron en una pelea contra Ngariman un hombre-gato y su tribu al que molestaron con sus risas, por entonces habían adquirido la forma de gigantes que llegaban hasta el cielo. Su madre Dilga, la diosa de la tierra, debido a su rabia hizo que su leche fluyese hasta el lugar del asesinato reviviendo a las víctimas y ahogando a sus asesinos. Al cabo de un tiempo sus cuerpos se convirtieron en serpientes de agua y sus espíritus se elevaron al cielo en forma de nubes.