Era uno de los titanes y dios de la providencia y los artesanos en la mitología griega. Era hijo de Jápeto y Clímene. Era padre de Deucalión. Se le atribuyen como esposas Asia, Calaeno, Hesione, Pronoia y Pirra. Se le consideraba el creador de la humanidad a la que creó a partir de arcilla y agua, además le ofreció el fuego a estos en contra de lo que había dictaminado Zeus.
En una ocasión Prometeo hizo dos montones con la carne de un buey sacrificado en uno puso todos los huesos, la piel y la grasa del animal mientras que en el otro puso la carne más sabrosa, al decirle a Zeus cual montón quería escogió el que parecía más grande y se sintió ofendido por el engaño, como castigo dijo que el fuego jamás sería dado a los humanos, Prometeo incumplió sus ordenes y les enseñó el fuego además de muchas otras artes a los humanos.
Zeus enojado por la desobediencia mandó como castigo a Prometeo ser atado a un palo en el Cáucaso y cada día un buitre devoraría sus entrañas, regenerándosele por la noche con lo cual el castigo era infinito y a los seres humanos les mandó a Pandora (una mujer creada por Hefesto) que abrió el cofre de Epimeteo que guardaba todos los males de la humanidad. Posteriormente Hércules libró a Prometeo de su tortura y Quirón le cedió su inmortalidad debido a que tenía una herida muy dolorosa y así podría morir en paz.
Salvó a la humanidad advirtiendo a Deucalión de que crease un arca para poder salvarse, así él y su mujer Pirra pudieron repoblar la tierra.
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